Guardados en bolsa de plástico se conservan muy bien entre 2 y 3 días, aunque como no tiene aditivos ni conservantes, si no vas a consumirlos en un par de días, te recomendamos que los congeles (partidos por la mitad). Al sacarlos, los pones en tostadora o sandwichera y listo :).
 
                         
 
         
 
         
 
         
    
    
      
      
        
      
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
   
    
    
      
      
        
      
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
   
    
    
      
      
        
      
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
 
      
    
      
      
        
          
        
      
      
        
        
          
        
        
